¡Y aquí está una de las curas para el despecho!

Se llama Rebecca Gibbs y al regresar del Reino Unido, después de lidiar con el fracaso de su matrimonio, decidió ponerle final a su compromiso marital y para llevarlo a cabo, terminó enviando su anillo de bodas al espacio.

Según publicaron algunos medios internacionales, Gibbs llevaba casada cuatro años y luego de su fracaso, envolvió su argolla en un cohete negro, llamado Gemma II, y lo envió decorado con un corazón rosado roto.

Según relata Gibbs, la experiencia fue única: "Fue estimulante y liberador. Se suponía que realmente iba ser un paso positivo y lo fue. También fue muy divertido la voladura del cohete en el cielo" declaró.

Ella y su ex marido vivían en el Reino Unido y como símbolo de la desunión, quiso deshacerse de todo lo que le recordase a él."Me di cuenta cuando volví que tenía muchas cosas de nuestra vida y de la boda que tenía que quitarme de encima. Mi madre y mis amigos me ayudaron y regalé el vestido de novia, pero no sabía qué hacer con el anillo", contó.

Gibbs confesó ante los medios de su país que, de hecho, fue el hermano de su nueva y actual pareja quien le dio la idea de lanzarlo al espacio. "Simplemente pensé que era una iniciativa increíble. Y no solo para mí sino también para él, para que supiese que estaba totalmente terminado", comentó Gibbs, quien señaló que su ex marido después de separarse le enviaba mensajes pidiéndole que siguieran juntos.
El lanzamiento fue programado para comienzos de este mes con la ayuda de dos amigos de Gibbs. Lo realizaron cerca de una plataforma de concreto en la península de Banks. Sin embargo, aún no está claro qué altura alcanzó el cohete con el anillo.