El festival bilbaíno, como cada año, cambia de estilo en función de las estrellas del cartel y en esta edición el protagonismo será para la música de los años 90 y las bandas de metal, frente al pop-rock que caracterizó a la anterior convocatoria gracias a The Police y REM.
La primera jornada, hoy, estará dedicada al heavy metal con los norteamericanos Slayer y los berlineses Rammstein con su estilo industrial y su espectáculo de fuego sobre el escenario.
El viernes será el turno del "grunge" con las bandas de Seattle Alice In Chains y Pearl Jam, el concierto más esperado del festival, y un preludio totalmente distinto a cargo de Paul Weller, líder de The Jam y Style Council y gran influencia del brit-pop, la otra gran corriente del rock en los años 90.
El BBK Live cerrará el sábado con una serie de grupos de gran interés y estilos variados, como Feeder, Faith No More y su funk-metal, los nórdicos The Soundtrack of our Lives, los joviales Los Campesinos!, el líder de los influyentes Wilco, Jeff Tweedy; Manic Street Preachers y los potentes australianos Jet, encargados del concierto de cierre del certamen.
La organización del festival espera reunir en el monte Kobetas, a escasos kilómetros de Bilbao, a más de 70.000 espectadores durante las tres jornadas, una cifra similar a la lograda el pasado año.