"Se metieron con el consumidor de comidas procesadas sedentario equivocado", ha advertido el actor, quien no tiene problema en reconocer su problema de peso.
"Había un pasajero más gordo que yo y lo vi cuando me bajaban del avión. Cruzamos las miradas y con la suya él me suplicó que no dijera nada", ha relatado Smith en Internet.
La aerolínea ha ofrecido sus más sinceras excusas y un vale de 100 dólares a "Bob el Silencioso", pero se ha mantenido firme en su postura, y asegura que tomó la decisión en aras de la "seguridad y comodidad" de todos los pasajeros.