Sucede que Ari Inácio Hermes, de 62 años, se casó y enviudó. Luego se volvió a casar con la hermana de su difunta esposa pero enviudó nuevamente. Hace cuatro años se volvió a casar con otra de sus cuñadas y aseguran que en el pueblo todos aceptan esta situación.
Según publica el portal digital Globo de Brasil, el agricultor conoce a las mujeres de la familia Agnes desde la infancia. A los 22 años él se casó con Ilária, que en esa época tenía 19 años. Las cuñadas, que después se convirtieron en sus mujeres, se llamaban Mercilda, en ese entonces con 28 años e Ilse, de 15.
Con su primera mujer, con quien duró seis años, Hermes tuvo do hijas y su esposa Ilária murió de tétano. Con su segunda esposa, Mercilda, fueron 29 años de matrimonio y no tuvieron hijos.