La cita fue en el restaurante Villa Sorriso, en Pasadena, a unos 12 kilómetros del cementerio Forest Lawn, donde Jackson recibió sepultura.
Se esperaba que a esta celebración asistieran unas 150 personas.
Al entierro asistió su familia y amigos más cercanos. Según la prensa local, la Policía cerró varias calles próximas al recinto y hubo con vigilancia aérea. Sin embargo, no se esperó la presencia de grandes masas de curiosos.