El grupo de rock británico Rolling Stones llegan hoy a Rusia tras nueve años de ausencia para un concierto multitudinario en la antigua capital de los zares (San Petersburgo).
El cuarteto británico, con 44 años de carrera a sus espaldas, ofrecerá mañana, viernes, un concierto en un lugar único, la Plaza del Palacio de San Petersburgo, ante más de 40.000 espectadores, la mitad sentados.
Ante la preocupación de la dirección del Ermitage, los organizadores han prometido que el volumen del sonido durante la actuación de los Stones no superará los cincuenta decibelios.
Mick Jagger y sus compañeros llegarán esta tarde a la ciudad acompañados de más de 400 personas, entre familiares, músicos, técnicos y guardaespaldas.
Según la compañía PMI, organizadora del concierto, los músicos dedicarán la jornada de mañana y la del sábado a visitar el museo del Hermitage y varios de los numerosos palacios que adornan la segunda ciudad rusa.
Medio millar de policías se encargarán de garantizar el orden durante la actuación del grupo, mientras se cerrarán al tráfico varias de las calles adyacentes a la Plaza del Palacio.
El veterano cuarteto ofreció su único concierto en Rusia el 11 de agosto de 1998 ante 60.000 espectadores en el estadio Luzhnikí de Moscú, antes Lenin.
Debido a la reputación transgresora del grupo, el ministerio de Cultura de la Unión Soviética prohibió en los años 60 y 70 difundir sus canciones por radio y televisión.