Steven Adler, el baterista de la extinta banda Guns N’ Roses, tuvo que interrumpir una presentación en vivo en la capital mexicana para ser atendido de emergencia por paramédicos de la Cruz Roja
El músico, que encabeza una gira con su propio grupo, Adler’s Appetite, para conmemorar los 20 años de historia del disco «Appetite for Destruction», no necesitó ser trasladado a un hospital, dijo el jueves a la AP una empleada de la Cruz Roja a condición de anonimato.
Preliminarmente se difundió que Adler había sufrido un episodio de hipertensión arterial, que de no tratarse podía derivar en un infarto. La información no pudo ser confirmada.
Adler fue expulsado de Guns N’ Roses en 1990 por consumo de drogas, como él mismo ha confesado.
Luego entabló una demanda diciendo que era uno de los dueños del nombre del grupo y exigió regalías. El músico ganó el caso y recibió una compensación económica. Matt Sorum pasó a reemplazarlo