Siete años después la fama le jugó una mala pasada cuando cayó víctima del alcoholismo y la drogadicción.
Drew superó sus problemas y retomó con éxito su trayectoria cinematográfica y su relación sentimental luego de varios fracasos.
A los 30 años, enamorada de Fabrizio Moretti, el baterista de The Strokes, sigue siendo una estrella que no deja de arriesgarse para encontrar lo que quiere.
«Me siento en la mejor etapa de mi vida, quiero obtener la mayor cantidad de sabiduría posible y ser feliz», había confesado recientemente la popular estrella de Hollywood.
La obra aburrió a la pareja, que decidió cambiar la música por la fantasía erótica de hacer el amor en un lugar público y nada mejor que el famoso edificio cultural.
El baterista de Strokes, confesó en una entrevista para la revista «Jane», que hoy reproduce el sitio Infobae.com, que ante el aburrimiento, decidieron ir al baño para tener sexo.
Fabrizio Moretti reconoció, sin dar muchas precisiones en cuanto al tiempo transcurrido, que fueron sorprendidos «fue muy vergonzoso», detalló escuetamente el rockero.
Drew no hizo declaraciones y solo se recuerdan las últimas definiciones sobre su actual pareja «afortunadamente, en este momento cuento con alguien que es muy comprensivo y que me apoya todo el tiempo, lo cual me hace muy feliz», aunque los sorprendan en un acto no previsto en el repertorio de la ópera.
Tomado de latercera.cl