El divorcio de su esposa, Heather Mills, le podría salir muy caro al ex beatle Paul McCartney, cuya fortuna de unos 1.204 millones de euros podría verse considerablemente reducida por culpa de la separación, según ha informado hoy la prensa británica. Los expertos legales del país apuntan que esa separación podría convertirse en la mayor batalla judicial por divorcio en el Reino Unido, ya que la pareja no pactó en su día ningún acuerdo prematrimonial.
La pareja anunció ayer en un comunicado su separación «amistosa», tras cuatro años de matrimonio y una hija de dos años en común. Mills podría exigir unos 200 millones de libras de la fortuna de McCartney, el músico más rico del país. A pesar de que en ocasiones la prensa británica ha tachado a Mills de «cazafortunas», McCartney, de 63 años, negaba anoche en su página web esta acusación y defendía a su ex pareja.
Además, Mills, 25 años más joven que el músico, ha declarado que ella quiso firmar un acuerdo prematrimonial, que protegería la fortuna del músico, pero que McCartney lo rechazó porque era algo «muy poco romántico». Según los rotativos, la ex pareja estaría esperando con atención la resolución de un importante caso de divorcio, cuya sentencia se fallará la próxima semana y que podría afectar a la separación de McCartney y Mills.
Su historia
Heather Mills es la segunda esposa de McCartney, que se quedó viudo tras la muerte por un cáncer de pecho en 1998 de su primera pareja, Linda Eastman, con la que estuvo casado durante 29 años y tuvo tres hijos.
Tras tres años de noviazgo, el ex Beatle y Mills pasaron por el altar en el año 2002 y celebraron su unión con una fastuosa boda en el castillo Leslie de Irlanda. Durante los cuatro años de matrimonio, la pareja ha sido centro de rumores y especulaciones en la prensa por lo que parecía una tempestuosa relación en la que el carácter inquieto de Mills chocaba con el apacible McCartney.
Tomado de https://iblnews.com