Kravitz abrió su espectáculo con la primera canción de su último trabajo, Minister of rock n’ roll. Lo suficiente para que la masa se entregara con esos primeros acordes. A esa canción le siguieron varios guiños a la música gospell y motown.
El concierto se desvió poco después hacia algunos de sus éxitos de siempre, por los que ha sido reconocido con varios premios Grammy, como Let love rule, Are you gonna go my way o Fly away que se intercalaban con sus temas más pegadizos de su último álbum, Baptism como Where are we runnin’”.
Cada tema iba acompañado de una sonora ovación que se prolongaba durante algunos minutos en algunas ocasiones. Y si parecía que la intensidad bajaba en aquellas interpretaciones a medio tiempo, Lenny Kravitz se encargaba de subir la tensión
Un músico con talento
En total, Benidorm pudo disfrutar con más de dos horas de espectáculo en las que el vocalista hizo gala de su extraordinaria habilidad para dominar varios instrumentos, como ya ha demostrado en su último álbum de estudio, el que ayer defendió en directo.
Destacable además los músicos que le acompañaron, que pusieron de relieve la exquisitez del solista a la hora de exigir un excelente sonido. Solos de guitarra, saxo, etc., pusieron el colofón a una de las citas de más calidad con que ha contado Benidorm, informa agencias.
Tomado de 40 Principales España.