Los últimos días de The Beatles fueron como los del imperio romano. Al menos así lo pensaba el que fuera alma del grupo más importante de la historia de la música, John Lennon. Y así se lo dijo a un periodista de la revista Rolling Stone en diciembre de 1970, apenas ocho meses después de la separación de la banda. La grabación de la entrevista, inédita hasta ahora, se emitirá mañana en Radio 4, de la BBC.
En dicha entrevista, John Lennon explica a Jann Wenner, fundador de la célebre revista musical, la decadencia del grupo en sus últimos años, los enfrentamientos con Paul McCartney, su hartazgo y su resentimiento por esos últimos tiempos y otras circunstancias que terminaron en la separación de The Beatles a principios de 1970. Wenner piensa que la cinta muestra al Lennon más sincero. «No hubo una palabra en la entrevista que no tuviera valor o que no fuera interesante», ha dicho el entrevistador al hilo de la emisión de la charla.
Lennon relata, por ejemplo, que el círculo que rodeaba a The Beatles era como una «Roma portátil» de dinero, sexo y drogas en la que «todo el mundo quería entrar». Apenas unos meses después de la ruptura con sus compañeros, el músico revienta la imagen idílica que se tenía de los cuatro de Liverpool y critica al círculo de satélites que orbitaba en torno a la banda: «Todos los que nos rodean quieren que la imagen continúe, por eso algunos se aferran a ella. No os llevéis nuestra Roma portátil, donde todos podemos tener nuestras casas y nuestros coches, nuestras amantes y nuestras esposas, nuestras secretarias y fiestas y bebida y drogas».
Además, Lennon saca a relucir el lado más oscuro de la propia banda cuando salía de gira, al decir que «si no podías tener groupies [seguidoras del grupo], teníamos putas. Todo valía». Y no se excluye de la decadencia: «Hay fotos mías arrastrándome a la salida de prostíbulos de Ámsterdam con gente diciéndome ‘Buenos días, John'». Según el autor de Imagine, dichas fotos no salieron en su día a la luz porque la gente no quería un «gran escándalo» relacionado con ellos.
«Paul es capaz de hacer un gran trabajo»
También tiene palabras de crítica para su ex compañero y segunda pata del grupo, Paul McCartney, cuyas relaciones se agriaron en la última etapa de la formación. «Nos hartamos de ser los acompañantes de Paul tras la muerte de Brian Epstein [el manager de la banda]. Él tomó el relevo y se suponía que nos guiaba. ¿Cómo nos vas a guiar cuando sólo deambulas dando vueltas?». Además, relata que ambos dejaron de escribir canciones juntos «sobre 1962, más o menos», esto es, ocho años antes de la ruptura. «Nuestro mejor trabajo, aparte de las primeras [canciones] como I want to hold your hands, las escribimos por separado». En todo caso, muestra respeto hacia McCartney: «Es capaz de hacer un gran trabajo, y lo hará».
Tampoco George Harrison, otro de sus ex compañeros, se libra de los dardos del excéntrico músico, destacando que «estaba trabajando con dos compositores brillantes y aprendió mucho de nosotros». E ironiza que no le «hubiera importado ser George», del que critica su primer disco en solitario, All things must pass (1970).
Los Stones también son blanco de un Lennon inmerso en la rabia y con la lengua desatada. Para él, Mick Jagger, cantante y líder de la banda, era «una broma», y relata: «Me gustaría hacer una lista con lo que hicimos y lo que hacían los Stones dos meses después de cada uno de nuestros álbumes. Mick nos imitaba».
«Ser un genio es una tortura»
Lennon utiliza todo este ambiente, el trato que recibieron él y la que ya era su pareja, Yoko Ono, de «The Beatles y sus colegas», para justificar su caída en la heroína. «Sufríamos de verdad», dice. También suspira por los quebraderos de cabeza que le da su propia personalidad. «No es divertido ser un genio. Es una tortura».
Finalmente, destaca el cambio que supuso en su vida la entrada de Yoko Ono y la alegría que inundó su alma en su compañía. «He pasado por todo, y nada funciona mejor que tener a alguien a quien amas a tu lado».
La entrevista se emitirá en el canal Radio 4 de la BBC mañana a las ocho de la noche (hora peninsular española).
Tomado de 40 Principales España.